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La pandemia ha causado disrupciones en todos los sectores de la sociedad, desde la salud hasta los mercados financieros, con fuertes repercusiones en el mercado laboral y las cadenas de suministro.
Algunos de los impactos que podemos mencionar:
- Ciberseguridad: los ataques de ransomware son cada vez más frecuentes y sofisticados, y siguen siendo una de las principales amenazas para las empresas para los próximos cinco años, según los líderes consultados en nuestra más reciente encuesta anual global de CEOs.
- Otra consecuencia se produce en el ámbito social: los clientes, inversores y otras partes interesadas también se centran en los factores ESG, sobre todo a la luz de la reciente propuesta de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por su sigla en inglés) de divulgación de información sobre el cambio climático.
- También se ha producido una aceleración en la transformación digital, donde la Encuesta Global de Riesgos 2022 de PwC encontró que el 79% de los ejecutivos cree que mantenerse al día respecto al ritmo de la transformación digital es un desafío significativo de gestión de riesgos para su organización.
En resumen, la dinámica actual de los negocios está cambiando nuestra forma de ver el riesgo y las oportunidades. Aunque cualquiera de estos cambios o riesgos tan diversos puede causar impactos significativos por sí solo, es su grado de interconexión lo que ha provocado consecuencias de gran alcance.
Las organizaciones líderes mejoraron su resiliencia y también su madurez ante el riesgo, de modo que hoy están preparadas para aprovechar las nuevas oportunidades con mayor confianza. Las decisiones basadas en el riesgo son importantes y ya no ocurren en silos. Navegar el riesgo requiere la supervisión del CEO y la responsabilidad de los directorios.
CEOs: cuatro acciones para cambiar la forma que ven el riesgo
Visión integral de los riesgos
Una capacidad sólida de visualizar el riesgo, junto a la resiliencia, proporcionan una ventaja competitiva que permite crecer y lograr resultados de confianza, anticipándose al riesgo. Los CEOs deben tener una visión integral de los riesgos: conocer todas las piezas que contribuyen al riesgo estratégico, operativo, normativo y tecnológico, y sus repercusiones en toda la organización.
Promover una cultura sólida del riesgo
Impulsar una cultura del riesgo es una herramienta clave para ayudar a los líderes y a los colaboradores de una organización a comprender dónde pueden asumir más riesgos en pos de la estrategia, las nuevas oportunidades y el crecimiento.
Una cultura sólida del riesgo también desempeña un papel fundamental a la hora de aprovechar las ventajas que éstos conllevan de una manera ágil, en consonancia con el propósito y los valores de la organización.
Prevenir el riesgo con el uso de datos
El mundo se encuentra en un proceso de constante cambio y con ello se dificulta cada vez más identificar y prevenir el riesgo, el cual se gestiona frecuentemente en base a la experiencia y el análisis de consecuencias que podría generar.
Con menor frecuencia, las organizaciones utilizan datos para identificar patrones y detectar señales de advertencia de nuevas amenazas en todo el espectro de riesgos.
Sin embargo, los datos en tiempo real se utilizan en muchos sectores, tal es el caso del marketing digital, el cual usa los datos de los consumidores para planificar mejor sus acciones.
Aunque se aplican de forma diferente, estas técnicas y herramientas pueden adoptarse para anticipar riesgos y responder con agilidad. Nuestra Encuesta Global de Riesgo 2022, reveló que el 72% de las organizaciones tiene previsto aumentar el gasto en tecnología para apoyar la detección y el seguimiento de los riesgos.
Involucrar a una comunidad diversa de especialistas
Para aprovechar las oportunidades teniendo en cuenta los riesgos, y poder gestionarlos, se necesita un equipo de trabajo multidisciplinario.
Nuestra Encuesta Global de Riesgos mostró que las organizaciones se están moviendo en la dirección correcta, con un 70% que ahora prioriza la diversidad en los equipos de riego, aprovechando las alianzas para aportar experiencia y tecnología a la organización y mejorar la conciencia de riesgo de las áreas operativas.
En resumen, gestionar el riesgo no es solo responder al cambio. Se trata de cambiar nuestra forma de ver, y considerar diferentes enfoques para anticiparnos y habilitar nuevas posibilidades. Ayudamos a nuestros clientes a cambiar su forma de ver el riesgo.
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